Rápidos y furiosos: Hobbs & Shaw

Esta novena entrega en cuanto locura e insanidad se trata no decepciona; y sí puede llega a ser estupida y ridicula pero al mismo tiempo esto la hace brillante y la hace una experiencia muy divertida.

Todos hemos escuchado las burlas constantes que este universo ha recibido, que solo son películas locas con autos geniales y acrobacias que desafían la física, pero Hobbs & Shaw, tiene una manera genial de que empatices con los protagonistas mostrándote cómo contrastan y al final como tienen que ser un equipo para triunfar.

Aunque si bien el guión emplea el viejo truco del "virus que destruirá el mundo" que toda peli de espionaje ha tenido antes, eso se compensa de manera muy buena con mucho de lo que hacen estos dos juntos en la pantalla, incluso si la mayoría de las bromas se reducen a quién puede flexionar sus músculos más fuerte y quién supuestamente tiene partes más grandes.

A medida que la acción se desplaza desde Los Ángeles a Londres, de Moscú a Ucrania para llegar a una batalla épica final en Samoa, con varios cameos sorpresa demasiado geniales para arruinar aquí, pero ya con nueve películas y 18 años en esta franquicia, el público es completamente consciente de lo que se ofrece con esta historia y mientras Hobbs & Shaw está probando algunas cosas nuevas al ser el primer spin-off, logra hacer exactamente lo que promete hacer, ser una película de acción con mucha diversión.

Definitivamente recomiendo ir a ver Hobbs y Shaw, para desactivar tu cerebro y pasar un buen rato.

Por: Brian Basurto